FurAna
Tania Cortés
Número revista:
3
Silencio

Un incesante vértigo anida en el silencio; es umbral en el cual oscuramente todo se suscita a partir de nada. En cada encrucijada, cada instante en que una decisión debe ser tomada, el silencio apremia a dar el salto, incita al grito. La palabra solo puede atisbar, insinuar el silencio; nunca lo abraza, simplemente se solapa a él, lo ahonda.
El logos presume ser puente que permite comunicar lo pleno, lo total; pero, mientras un puente tan solo une, el silencio separa. En lo callado, el azar se cocina, caldo primigenio del cual todo puede brotar; singularidad grávida de posibilidad en la cual lo lleno linda con lo vacío y lo que es yace aferrado a lo que no es. El logos aspira a ser, mas el secreto persevera en su oscuro primitivo. Síncope, pausa, intervalo en la que la palabra se hunde, se ahoga y renueva luego el ansia de decir, de ser.
«Siente el agua del lago subiendo por su / corazón roto. (...) Lo único que le queda por hacer es andar en círculos alrededor del cenicero o sacar libros a la bariola de las repisas».
Martin Crimp, Atentados contra su vida.
Música: Tania Cortés
Mezcla y máster: Óscar Bahamonde
Video: David Pinto