Encierro
Quinto número
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La posibilidad de un horizonte, de un resquicio de cielo por donde se cuela un rayo de luz se desvanece con el encierro. Dispositivo inmunológico, habitación oscura, sin detalles, sin colores, alrededor el mundo se marchita y pierde su lumbre, la realidad se idealiza en su deriva hacia el adentro invisible. Solo la memoria guarda la sensación del fulgor —ya antiguo— de un mundo antes del encierro.
Cerrar o abrir los párpados deja de tener importancia, el espacio deviene en imagen, cada paso ciego puede convocar un objeto nuevo, perdido con el temor de convertirse en nictálope. El encierro suspende el movimiento en el espacio; pausa que exacerba el pensamiento de la prisión del ensueño, lo inmóvil abre la puerta al espíritu sediento, el vacío interior se devela como un campo por encontrar una y otra vez lo ya hallado. El encierro dura un instante, el instante en el que el paisaje íntimo dibuja la línea de un nuevo horizonte que se abisma con la mirada ensimismada.
Seis u ocho ojos sobre el campo minado
Juan Sebastián Martínez
Tema libre
Hay bombas bajo las ciudades alemanas —estos artefactos llovieron desde los aviones que peleaban la Segunda Guerra Mundial—. Por alguna falla no detonaron en su época, aunque aún podrían reventar. Nadie sabe bien dónde están tales explosivos…
La vida breve: Brausen en el panóptico de Gertrudis
Aitana Samaniego
Tema dossier
Camuflado entre las gruesas paredes de su departamento —esperando, como todos, la tormenta de Santa Rosa— encontramos a Brausen. Un hombre drenado por la vida y sus vaivenes, intentando salir vivo de entre las cicatrices de su Gertrudis, estancado con un argumento que se muestra irresoluto en la mente e imposible de transmitir al papel.
El miedo como órgano que paraliza: sobre “La madriguera”, de Franz Kafka
Sebastián Armas
Tema libre
En el ensayo «Franz Kafka, en el décimo aniversario de su muerte» (1934), Walter Benjamin resalta el estilo parabólico y el tono insólito de las narraciones del escritor checo, comparándolas con relatos que recupera de las tradiciones rusa, judía y china.
Virginia Woolf: «Alabado sea el cielo de la soledad»
Fernando Albán
Tema libre
Epifanía visual. El gesto escritural inaugurado por Virginia Woolf confina, retiene, enmarca definitivamente el acontecimiento sensorial, las olas de la vida impersonal, la lluvia o la dispersión de átomos en el espaciamiento de su archivo.
La casa como nación y el encierro como convivencia en El Prisionero de las Lomas
Andrés Ruíz
Tema dossier
El prisionero de Las Lomas es una de las cinco novelas cortas que conforman Constancia y otras novelas para vírgenes del mexicano Carlos Fuentes. Escrita a finales de los ’80 por un Fuentes maduro, la obra sigue un argumento bastante simple: el joven abogado Nicolás Sarmiento hereda con chantajes una mansión churrigueresca en la que se recluye primero voluntariamente para levantar un emporio comercial y luego obligado por su servidumbre, que lo mantiene preso como acto de justicia.
El original de: Hudinilson Jr.
Manuela Irarrázabal
Tema libre
La dicotomía entre ‘original’ y ‘copia’ como forma de establecer jerarquías de valor está profundamente enraizada en las culturas occidentales. La Teoría de las ideas de Platón es un viejo ejemplo: lo que consideramos como realidad es simplemente una réplica de las Formas Puras a las que no tenemos acceso con nuestros sentidos.
¿Quién por fuego, quién por agua, quién por Gregorio Samsa?
Luis Borja
Tema libre
Como buen kafkiano (de igual manera se podría decir como buen faulkneriano o como buen shakesperiano), Vásconez comprende que en la relación padre-hijo, en lo que resulte de ella, se juega, de algún modo, también, el destino de la humanidad: acuerdo o discordia entre pasado, presente y futuro.
Javier Vásconez: algunos recursos literarios y la contradicción en ciudades latinoamericanas
Juan Fernando Bermeo Palacios
Ensayo libre
Si hay algo que se agradece como lector habitual de ficción, es el hecho de disfrutar personajes creíbles dentro de una ambientación coherente (aún dentro de sus propias reglas, dentro de la ficción en sí).
La pervivencia del ser: una lectura a Carta larga sin final, de Lupe Rumazo
Israel Muñoz
Tema libre
Leer es un acto intenso y misterioso; una acción que no inicia ni se reduce a la decodificación de signos lingüísticos yacentes sobre una superficie, el trayecto de una lectura empieza mucho antes de abierto el libro y, a veces, no tiene fin.
La pasión de escribir (o reflexionando sobre La enfermedad de escribir de Charles Bukowski -Ed. Anagrama)
Julio Barco
Tema dossier
Cuando pienso en Charles Bukowski, pienso simplemente en alguien apasionado con la escritura. Y es que, aunque la imagen que nos venda la sociedad sea la de un viejo procaz y alcohólico, en realidad, el viejo Bukowski fue uno de aquellos escritores adictos a escuchar la música de su máquina.
Ba… ba… bla… el balbuceo que da vida. Una lectura de Cuerpo de María Auxiliadora Álvarez
María Auxiliadora Balladares
Tema libre
Ahí, donde las narrativas sobre la maternidad en la modernidad tardía se asumen desde la romantización del acto de dar a luz, la yo poética de Cuerpo vive una experiencia que no solo no romantiza, sino que a partir de ella expone la precarización de un sistema de salud pública que arrastra a millares de cuerpos de mujeres en trance de parir a ser pensadas y tratadas como máquinas de reproducción de vida.
Convivir con el fantasma (fragmento)
Josué Durán Hermida
Tema libre
Un neogótico, un revival del gótico, una recuperación de algunos de sus elementos. No soy ni de lejos el primero a quien esta opción se le ocurre adecuada. Es más, se trata de un fenómeno contemporáneo que tiene en María Negroni a una de sus grandes ensayistas y en Mariana Enríquez y Mónica Ojeda a sus más díscolas fabuladoras.
Capítulo de la novela EN CLINCH, DEMASIADO CERCA
Santiago Páez
Doménico, apoyando el pecho en la balaustrada de seguridad que bordea el despeñadero, mira esa hondonada hasta donde llega la noche antes que al resto de la urbe. Un ventarrón helado, violento y maloliente, subiendo desde el abismo, le golpea en la cara y agita sus cabellos.
El seto
Marcela Ribadeneira
¿Te acuerdas cuando el mundo era un océano infinito que rompía contra la ventana de tu cuarto, cargado de promesas y de posibilidades, de una expectativa salina que te erizaba la piel y encendía una llamita en tu estómago? ¿Cuando dejabas las cortinas descorridas para que la luna se decantara sobre tu cara?
El coleccionista de sombras
Javier Vásconez
Había algo invariable en su vida y consistía en dormir mal. Cada noche era lo mismo. Una profunda ansiedad ante la perspectiva del insomnio. Mientras escuchaba los gemidos del viento, pasaban ante él párrafos dispersos e inconexos de algunos libros dispuestos en su biblioteca.
«Es de enorme importancia que se escriba gran poesía, pero no importa en absoluto quién la escriba».
Ezra Pound
Jardín transparente, selección de poemas
Camila Peña
Un hueco en el talón derecho de donde se escapa la sangre. En la hierba un camino rojo que conduce al jardinero a cada herida. Encuentra a los seres con su piel transparente. Con sus venas que se asoman como relámpagos azules que declaran en silencio estoy vivo, esto que ve usted es mi piel.
La novela: un mundo hecho de palabras
Entrevista a Javier Vásconez por Yanko Molina
Luego de una serie de dubitaciones y equívocos, después de haber recurrido y fallado en distintas plataformas, por fin puedo ver el rostro de Javier Vásconez al otro lado de la pantalla. Hubiera preferido hacer el mismo camino que he realizado durante los últimos años: atravesar el parque de Santa Clara, abordar el antiguo ascensor de puerta batiente y encontrar su cara mientras me abre la puerta de su estudio. Dentro, rodeados de libros, tomar un café —preparado ese mismo momento por el escritor— mientras conversamos.
Ahora, la pandemia me ha alejado de mis amigos y apenas salgo de casa. La virtualidad es apenas un esbozo terriblemente torpe de la vida afuera. La cara que veo me sorprende con los lentes que usa frente a la computadora. Veo a un anciano que sonríe, él también algo desconcertado. Pronto, esa impresión se disolverá con la vitalidad del diálogo, con la calidez que vence incluso la distancia. Javier es una persona apasionada, visceral, que puede parecer áspera al principio, pero que pronto se manifiesta hospitalaria y con quien la amistad florece fácilmente, siempre salpicada de polémicas, de discusiones interminables sobre literatura, incluso de desconcertantes exabruptos guiados por una incontenible pasión por las letras.
A sus espaldas, hay libros, retratos de escritores. No tardamos mucho en ponernos al día. Enseguida, empiezo a preguntar.
El poema, un artilugio de la esperanza
Entrevista a María Auxiliadora Álvarez por César Eduardo Carrión
Son pocas las ocasiones en que los lectores de poesía tenemos la suerte de conocer personalmente a quienes están detrás de aquellas grandes firmas y libros que nos atrapan y cambian la vida para siempre. Son más escasas aún las oportunidades que tenemos de encontrar en esas figuras a grandes personas: hospitalarias, generosas, solidarias. Son muchas menos las veces en que de esos encuentros se derivan coincidencias vitales, que van más allá del contacto que tenemos a través de los textos, de las palabras que nos unen en comunidades impensadas, en colectivos espontáneos, sin banderas, sin territorios. He tenido la suerte de conocer personalmente a una de mis poetas predilectas, cuya obra conocí hace muchos años, y cuyos versos han constituido para mí una valiosa compañía en tiempos de incertidumbre y pesimismo. De ella aprendí que el poema puede ser un cuerpo doliente, pero también un mecanismo de sanación, un procedimiento, un artilugio de la esperanza. Se trata de María Auxiliadora Álvarez, a quien vi por primera vez en Cuenca, cuando ambos fuimos parte del jurado del Festival de la Lira, uno de los certámenes literarios más relevantes del Ecuador. Conocedora de esta amistad y mi admiración por su obra, la revista Elipsis nos ha invitado a dialogar, a la distancia y de forma telemática, para intercambiar opiniones sobre su obra literaria, y sobre el sentido y lugar de la escritura poética, al cabo del primer año de la crisis pandémica, que inaugura la segunda década del siglo XXI. Este es el resultado de aquella conversación, con una de las poetas latinoamericanas más importantes del cambio de siglo.
«La luz es lo que se encuentra en el centro del misterio».
Basarab Nicolescu
'Más allá’: la sala de espera como un nodo
Reseña del libro de Anna Borisova (Boris Akunin)
Andrea Torres Armas
Reseña libro
Desde que Marc Augé publicara en 1992 su obra Los no lugares, nuestra forma de entender ciertos espacios y su relación con el tiempo y el tránsito ha variado. Los no-lugares son esencialmente contemporáneos; son espacios de tránsito, de confluencia momentánea, anónimos y despersonalizados.
Cazadoras de la noche de Luz Abreu
Diana Torres
Reseña libro
Cazadoras de la noche es un (paréntesis) al estupor que escruta a sus lectores y los invita a conversar en el vacío existente entre confesión y confesión. Entre el lenguaje de Luz Abreu y el idioma de Pamela Suasti. Significante y significado amalgamados en un todo.
Casi de noche en la ciudad de Javier Vásconez
Sylvia Miranda
Reseña libro
Casi de noche, sugestivo título que genera en el lector una expectativa, un misterio, como de caballos salvajes, como de noches de lluvia, como de pasos vacíos en ciudades transfiguradas por la nieve, que parece invitarnos a ir allí, lejos, donde algo todavía nos espera un mundo totalmente otro y tan íntimamente nuestro.
El corazón de un canalla
Doble Rostro (2018)
Darío Granja
Reseña libro
‘El corazón de un canalla’ del escritor quiteño Francisco X. Estrella es una historia mínima compuesta por fragmentos, recuerdos y reflexiones de un hombre agotado que apunta su escritura hacia las mujeres. El género sexual importa en esta obra. Define los límites del comportamiento, los deseos y miedos inconclusos.
«Nuestros ojos devuelven la luz
Y la luz el silencio
Para nunca reconocerse
Para sobrevivir a la ausencia».